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La vivienda se implanta sobre un terreno de 17x32 metros con orientación SO hacia la línea de fondo, en un barrio cerrado del Partido de Tigre.

El volumen es un prisma regular horadado en dos de sus ángulos donde se generan las expansiones y los espacios semicubiertos.

La economía espacial, la superposición de usos y recursos, la utilización de técnicas y materiales apropiados, fueron una de las decisiones centrales al momento de la proyección de esta obra.

La casa se arma sobre muros que en su lógica estructural, liberan posibilidades de integrar adentro y afuera aprovechando la inercia de voladizos y vigas que se vuelven fachadas y galerías, permitiendo al desplazar las carpinterías, integrar los diferentes ámbitos que el clima permite aprovechar buena parte del año.

En el tratamiento del espacio interior buscamos que tuviera mucha fluidez y que los ambientes no fueran cerrados en sí mismos.

En la planta baja se encuentra el living-comedor-cocina todo integrado, escritorio y el área de servicios, se utilizó como elemento de conexión entre las diferentes funciones de esta planta, un muro de color que actúa de fuelle entre los diferentes espacios.

En uno de los laterales se generó una pérgola en voladizo revestida en madera para proteger el sector de la parrilla.

En la planta alta se encuentran tres dormitorios hacia el frente, un playroom en el espacio central y un dormitorio principal ubicado en el volumen del fondo.

En esta planta el juego formal se da hacia el interior del prisma, vaciando el centro por un patio/pulmón que incorpora el sol del Norte y es recorrible por la circulación que va hacia los dormitorios.

Este vacío produce un movimiento en toda la planta, se trata de un vacío activo, capaz de cohesionar las partes generando a su vez una expansión del playroom.

La propuesta estructural fue generar mediante la misma transparencia y flexibilidad espacial.

Se utilizó una estructura independiente, hecha de Hormigón armado que nos dio la libertad deseada para la utilización de grandes superficies vidriadas.

Cada una de las fachadas de la vivienda, a pesar que tienen coincidencias en ciertas líneas y diseño, son distintas, permitiendo solucionar las diferentes necesidades interiores y las diversas orientaciones.

Las carpinterías vidriadas de piso a cielorraso bajo el gran alero de la galería regula la inercia solar.

Las aberturas y las circulaciones se disponen con el fin de establecer transparencias y conexiones con el exterior.

La ventilación cruzada en las dos plantas garantiza una aireación óptima en todas las estaciones del año.

Se utilizaron vidrios de diferentes características, transparentes en grandes paños y translucidos en rajas tabicales tipo profilit, fueron capaces de desmaterializar la envolvente de la caja arquitectónica.

Estos acompañan un lenguaje neutro que se completa con un mismo solado de porcelanatto en toda la casa, con el fin de unificar el plano horizontal.

El volumen que sobresale en el frente, tiene continuidad dentro de la planta baja generando un tabique divisor entre las diferentes funciones de esta planta. El mismo se revistió con placas de porcelanatto en color habano.

La desmaterialización de los bordes permitió tener una mejor relación con los espacios exteriores, generando espacios intermedios (semicubiertos) que actúan como fuelle entre ambos.

Planos
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[1] Planta baja
[2] Planta alta

Imágenes
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Acerca de los proyectistas
Para más información visite el sitio web epsteinarquitectos.com