Cómo crear un entorno saludable en los centros escolares

La ecopintura Airlite elimina el coronavirus humano, otros virus y bacterias y sustancias nocivas que contaminan el aire.

La pandemia del Covid-19 sigue modificando las pautas de comportamiento. Las investigaciones indican que este coronavirus se propaga especialmente a través de los aerosoles, pequeñas partículas que se expulsan al toser, estornudar, hablar, cantar o resoplar, que se quedan suspendidas en el aire y son la vía más importante de contagio. La purificación del aire interior se ha convertido en una de las máximas preocupaciones de la ciencia. La última prueba realizada por el University College de Londres ha demostrado que la ecopintura Airlite reduce el coronavirus humano en un 99% en solo 15 minutos.

Existe una renovada conciencia de la calidad del aire en las ciudades e interior de edificios -no solo por el coronavirus- y el impacto en la salud, sobre todo en niños y adolescentes, todavía en proceso de desarrollo, y en el que la mala calidad del aire provoca patologías en el corto y medio plazo, desde problemas respiratorios y alergias a dificultad de concentración y bajo rendimiento, pasando por ansiedad, infertilidad o cáncer. La tecnología de Airlite consigue que paredes y techos actúen como depuradores permanentes de aire, lo que mejora la calidad del aire interior.

Beneficios para centros escolares

Esta reflexión lleva a tomar medidas para propiciar que los centros escolares estén más protegidos. Están en riesgo 8 millones de estudiantes no universitarios. Airlite genera una protección especial para los centros educativos porque, gracias a la combinación de su activación por la luz y las propiedades alcalinas naturales, depura el aire, creando un entorno más saludable y seguro para niños y profesores, sobre todo por su eficacia contra los virus.

Amén del coronavirus influyen varios factores, como que las escuelas son caldo de cultivo de gérmenes y bacterias, la polución del aire, los ácaros del polvo y las esporas de moho. Una iniciativa tan sencilla como pintar los colegios con Airlite contribuye a crear un entorno más saludable porque la calidad del aire interior influye en el desarrollo físico e intelectual de los alumnos.

Con Airlite se ha pintado el Centro de Atención Temprana de Down Madrid. Las propiedades de esta ecopintura protegen especialmente a niños con mayor dificultad para mantener la distancia de seguridad y con patologías asociadas al síndrome de Down, como bronquiolitis, muchos ingresos hospitalarios y neumonías. En Italia está recomendado para colegios y guarderías por el Ministerio de Medio Ambiente. Ejemplos de los beneficios para los centros escolares los tenemos en la escuela de primaria St Mary’s RC, en Chiswick (Londres), en la escuela Bertola, en Rímini (Italia) y en la escuela de Milán (Italia), de la calle Sapri.

Eficacia antivírica

La capacidad de eliminar los virus de Airlite está avalada por estudios científicos. Los laboratorios de los Servicios de Investigación Virológica del University College de Londres acaban de mostrar los resultados más recientes, obtenidos según la norma ISO 21702: Airlite tiene una potencia antivírica contra el Coronavirus Humano que permite eliminar más del 99% del virus en tan solo 15 minutos.

Este último estudio sobre Airlite confirma las pruebas de la Universidad La Sapienza de Roma y el Centro de Detección de Microbiología de Guangdong en Guangzhou (China), que analizaron las cualidades antivirales de Airlite en otras dos cepas de virus: el subtipo H1N1 del virus de la gripe A y el enterovirus71 (EN71). Las investigaciones revelaron que Airlite descompone los virus hasta convertirlos en algo inofensivo.

La contaminación, un peligro silencioso

La contaminación constituye uno de los mayores peligros. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 92% de las personas habitan en áreas donde los niveles de polución superan los límites recomendados, situación que provoca la muerte prematura de más de ocho millones de personas al año. La doctora española María Neira, que dirige el Departamento de Salud Pública y Medio Ambiente de la OMS, la llama “el asesino invisible”.

Los niveles de dióxido de carbono (CO2) y dióxido de nitrógeno (NO2) en los colegios y guarderías pueden superar con frecuencia los límites recomendados: el valor máximo de CO2 para interiores es de 1.000 ppm y el de NO2 40 μg/m3 como media anual. Estos peligros se ponen de manifiesto en el informe de 2019 de Health and Environment Alliance (Heal), “Aire sano, infancia más sana”. En todos los centros se encontraron altos niveles de NO2 en el interior de las aulas analizadas.

Airlite reduce los contaminantes en el aire (hasta el 88,8%), incluidos los óxidos de nitrógeno (NOx) y los óxidos de azufre (SOx), muy perjudiciales para la salud, como los COVs, PM 2.5 o el formaldehído. También elimina el 99,9% de las bacterias (incluidas las superresistentes), esporas y moho. Combate de forma permanente los malos olores que se desprenden, y evita que la suciedad se deposite en las paredes, haciendo el ambiente más higiénico y confortable. La luz transforma las moléculas contaminadas en sales minerales inocuas. Además, está fabricada con ingredientes naturales, no lleva disolventes ni derivados del petróleo y produce cero emisiones. De esta manera proporciona un aire limpio y contribuye a mejorar la salud y la calidad de vida de quienes ocupan los edificios.



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