Casa Pilará (Pilar, Prov. de Buenos Aires, Argentina) por Besonías Almeida Arquitectos. Casa Pilará esta ubicada en un Club de Campo a pocos minutos de Pilar. Se trata de una urbanización campestre de grandes lotes desarrollada en las tierras de antiguas estancias bonaerenses de la llanura pampeana.
El principal interés paisajístico que brindan sus barrios es el haber mantenido la suave sinuosidad de la pradera, plantada con diferentes especies de árboles y arbustos autóctonos, acompañando el trazado de la urbanización. La casa ocupa un lote en esquina de forma irregular con una suave elevación respecto de las calles que lo circundan. Las veredas cuentan con jóvenes especies de catalpas y arces.
El encargo
Los comitentes, una joven pareja sin hijos, querían una casa desarrollada totalmente en planta baja -como una casa de campo, dijeron- aunque sin repetir su clásica tipología, ya que estaban interesados en la espacialidad compleja de las diferentes casas hechas por el estudio.
Querían también una amplia galería y una piscina en contacto con un paisaje proyectado, que imaginaban en total armonía con el paisaje natural de la llanura pampeana.
Como requerimiento especial solicitan que algunos ambientes de la casa se destaquen por presentar una mayor altura en relación a la estándar.
El programa
Un dormitorio principal con baño y gran vestidor, dos dormitorios de huéspedes con un baño para compartir, un sector social de amplias dimensiones con la cocina integrada y, vinculada a ésta, el lavadero y la habitación de servicio. Un “refugio” (espacio así nombrado por ellos) próximo al comedor para “tirarse” a descansar, leer o ver televisión, con un amplio camastro como equipamiento principal. Una cochera cubierta para dos vehículos y dos espacios descubiertos para estacionamiento de visitantes.
La propuesta
La casa se concibió como un volumen único que, ocupando la totalidad de la silueta permitida por el reglamento de construcción, se estructurara según una trama ortogonal que permitiera ir horadándolo hacia su interior, dando lugar a la creación de patios de diferentes escalas según los requerimientos de uso y ambientación de las actividades programadas en ellos.
Estos patios cumplen la función tanto de comunicar espacios como de aislarlos entre sí pero, sobre todo, su objetivo es crear paisaje a partir de la propia arquitectura, de manera que habitar esta casa sea una experiencia donde se diluyen los límites entre el afuera y el adentro para disfrutar de un clima que lo permite, y también del contacto con un paisaje proyectado con vegetación autóctona siempre cambiante a lo largo del año.
Hacia el exterior la casa se cierra en tres de sus lados con pantallas construidas con tablas de madera de quebracho en posición vertical que filtran las vistas desde ambas calles y desde el predio vecino, consiguiendo intimidad en todos los ambientes y el control de la incidencia del sol en las diferentes orientaciones. La fachada hacia el fondo propio se abre totalmente a través de grandes ventanales y una amplia galería con pérgola.
Para resolver la diferencia de altura entre ambientes requerida sin que la misma quedara acusada desde el exterior, debilitando la propuesta de volumen único, se resolvió que la zona social de la casa y el hall de acceso fueran los ambientes destacados con una altura de 3.05 metros.
La zona de los dormitorios se proyectó de 2.60 metros de altura libre, elevando el piso a 0.45 metros por encima de la cota de ingreso, salvando la diferencia con una suave rampa expuesta apenas se accede a la casa. Este espacio no es solo circulatorio sino que uno de sus lados abierto con un gran ventanal permite al recorrerlo ir descubriendo la espacialidad y vegetación del patio principal y, al rematar en un pequeño jardín, posibilita las vistas hacia el entorno y proporciona una pausa para cambiar la dirección de la circulación, independizando la zona del dormitorio principal de la de los dormitorios de huéspedes.
Volviendo al hall de acceso, apenas se atraviesa la puerta se hace evidente que la zona social de la casa fue concebida como una sucesión de espacios cerrados y abiertos comunicados entre sí cuya esencia se va descubriendo a medida que se circula por ellos. Se evita deliberadamente la comprensión de la totalidad de la obra en una rápida mirada, para así despertar el interés por reconocer la cualidad de cada espacio proyectado.
El tratamiento de la luz natural
En todos los proyectos del estudio existe una atención especial dirigida tanto a controlar la incidencia de los rayos solares sobre las superficies acristaladas como a aprovechar la luz natural como un material de proyecto que aporta riqueza a los espacios habitables.
Se concibe a las aberturas como tales, no como elementos estandarizados con medidas y posiciones predeterminadas sino como horadados en las construcciones que, por supuesto, permitan ventilar e iluminar los ambientes, pero también dejar indefinida la relación exterior-interior, enmarcar el paisaje, filtrar la luz, reflejarla en un muro, etc. Esas perforaciones son el resultado de las búsquedas particulares de cada proyecto y de las relaciones que se quieran establecer con su entorno específico.
En este proyecto en particular la forma y posición de las aberturas de los diferentes patios va definiendo una multiplicidad de atmosferas cambiantes que buscan resaltar la espacialidad de los ambientes.
Ficha técnica
Nombre: Casa Pilará
Ubicación: Pilar, Prov. de Buenos Aires, Argentina
Estudio: Besonías Almeida Arquitectos
Proyecto: Arq. María Victoria Besonías, Arq. Guillermo de Almeida
Colaboradores: Arq. Micaela Salibe, Hernán de Almeida
Superficie del terreno: 1538 m2
Superficie construida: 288 m2
Memoria: María Victoria Besonías
Fotografias: Federico Kulekdjian
Contacto
http://www.besoniasalmeida.com/
English version
Pilará House
Besonías Almeida Arquitectos
Memory
María Victoria Besonías
The location
Pilará House is located in a Country Club a few minutes away from Pilar. It is a rural urbanization of large lots, developed on the former ranch lands of the Pampa plains of Buenos Aires. The main landscape feature of its quarters is that it has maintained the soft sinuosity of the meadow, planted with different species of native trees and bushes, accompanying the layout of the urbanization.
The house occupies an irregularly shaped corner lot with a gentle elevation with respect to the surrounding streets. The sidewalks are planted with young species of catalpas and maples.
The commission
The clients, a young couple without children, wanted a house developed entirely on the first floor -like a country house, they said-, although without repeating its classic typology, as they were interested in the complex spatiality of the different houses built by the studio.
They also wanted a wide veranda and a swimming pool in contact with a projected landscape, which they imagined, in total harmony with the natural landscape of the Pampean plains.
As a special requirement, they requested that some rooms of the house stand out for having a greater height in relation to the standard.
The program
A master bedroom with bathroom and large dressing room, two guest bedrooms with a bathroom to share, a large social area with integrated kitchen and, linked to it, the laundry room and the maid’s room. A “refuge” (space named by them) next to the dining room to “lie down” to rest, read or watch TV, with a large bunk bed as the main equipment. A covered garage for two vehicles and two uncovered spaces for visitor parking.
The proposal
The house was conceived as a single volume that, occupying the entire silhouette allowed by the building regulations, would be structured according to an orthogonal grid that would allow it to be pierced towards its interior, giving rise to the creation of courtyards of different scales according to the requirements of use and ambience of the activities programmed in them.
These courtyards serve both to communicate spaces and to isolate them from each other but, above all, their purpose is to create landscape from the architecture itself, so that living in this house is an experience where the limits between inside and outside are diluted to enjoy a climate that allows it, and also the contact with a landscape designed with native vegetation always changing throughout the year.
To the outside, the house is closed on three sides with screens made of quebracho wood boards in vertical position that filter the views from both streets and from the neighbouring property, achieving privacy in all rooms and controlling the incidence of the sun in the different orientations. The façade towards the back of the house is completely open through large windows and a wide gallery with a pergola.
In order to solve the required difference in height between rooms without it being noticeable from the outside, which would weaken the single volume proposal, it was decided that the social area of the house and the entrance hall would be the outstanding rooms with a height of 3.05 meters.
The bedroom area was designed with a free height of 2.60 m, raising the floor to 0.45 m above the entrance level, bridging the difference with a gentle ramp exposed as soon as one enters the house. This space is not only circulatory, but one of its open sides with a large window allows to discover the spatiality and vegetation of the main courtyard, and ending in a small garden allows views to the surroundings and provides a pause to change the direction of circulation, isolating the area of the master bedroom from the guest bedrooms.
Returning to the entrance hall, as soon as one passes through the door, it becomes evident that the social area of the house was conceived as a succession of closed and open spaces that communicate with each other and whose essence is discovered as one moves through them. It deliberately avoids the comprehension of the totality of the work in a quick glance, in order to awaken the interest in recognizing the quality of each projected space.
The treatment of natural light
In all of the studio’s projects, special attention is paid both to controlling the incidence of sunlight on the glazed surfaces and to taking advantage of natural light as a design material that adds richness to the living spaces.
The openings are conceived as such, not as standardized elements with predetermined measurements and positions, but as perforations in the constructions that, of course, allow ventilating and illuminating the environments, but also to leave the exterior-interior relationship undefined, frame the landscape, filter the light, reflect it on a wall, etc. These perforations are the result of the particular searches of each project and the relationships that are to be established with their specific environment.
In this particular project, the shape and position of the openings of the different patios define a multiplicity of changing atmospheres that seek to highlight the spatiality of the environments.